BlockBuster fue uno de las más importantes franquicias de videoclubs que existió y que marcó la pauta en lo que a venta de películas por alquiler se refiere. Pero a pesar de su éxito, sus ejecutivos cometieron terribles errores que condenaron a este imperio a un irremediable fracaso.
Esta franquicia pasó de generar por más de quince años ingresos multimillonarios al controlar más del 25% del mercado de los videoclubes a cerrar sus 9000 sucursales distribuidas por todo el mundo, convirtiéndose en un caso digno de estudio en escuelas de negocios sobre lo que no debe hacerse para mantenerse a la cabeza en el mercado.
Se ha determinado que para que una empresa se mantenga en el tiempo y a la vanguardia debe adaptarse al ritmo vertiginoso que la era digital impone. Muchos ejemplos existen, entre los que destacan grandes empresas que hoy han sido devoradas por los avances tecnológicos a los que se adaptaron otras empresas más pequeñas que sí aprovecharon las oportunidades de negocio que brinda la tecnología.
Sin embargo, no solo el avance tecnológico es el único culpable, sino otros factores los que aceleraron el final de BlockBuster los cuales se explicarán a continuación.
Historia de BlockBuster
Esta empresa inició operaciones en 1985 de la mano de Wayne Huizenga, un empresario estadounidense natural de Illinois y quien poseía experiencia en negocios tales como Waste Management (una empresa dedicada a la gestión de residuos), AutoNation y Swisher Hygiene. Este hombre, también poseía franquicias deportivas en florida como los Miami Dolphins, los Florida Panthers y los Marlins.
BlcokBuster abrió su primera tienda física en Dallas y en un principio el éxito de la empresa fue enorme, ya que en aquél entonces los usuarios disfrutaban de la tecnología vanguardista de las cintas VHS acercándose a una tienda cerca de su casa, donde podían alquilarlas a un bajo costo.
El alcance de BlockBuster permitió que abriese cerca de 17 tiendas en todo Estados Unidos, para posteriormente expandirse a gran parte del mundo convirtiéndose en una transnacional. Este éxito llamó la atención de Viacom Inc la cual adquirió a la franquicia por unos 8.4 billones de dólares. Viacom Inc es una de las más importantes proveedoras de entretenimiento a nivel mundial.
¿Por qué fracasó?
El por qué fracasó una empresa tan exitosa es una de las preguntas que muchos se hacen y aunque parece obvia la respuesta, es imposible decir que se deba a una sola razón. De hecho, los expertos en el área reconocen que fueron muchos factores lo que fueron debilitando poco a poco a la empresa hasta que en el año 2010 sus ejecutivos declararon a la franquicia en bancarrota.
Sin embargo, la muerte de BlockBuster estaba previamente anunciada. Se encontraba en números rojos desde el inicio de los años 2000 y los expertos en negocios definían su situación como la de “un monstruo malherido y moribundo”.
Algunos afirman que la oficialización de la bancarrota se hizo como un mero formalismo, ya que la empresa no generaba ningún tipo de rentabilidad y a medida que pasaban los años era mucho peor su situación financiera.
¿Y entonces, cuáles fueron los factores que causaron el fracaso de BlockBuster? con toda seguridad, puede decirse que una de las principales causas de su fracaso fue el internet, pero no precisamente por el streaming.
Desde que el internet surgió, comenzó a marcar la pauta de cómo debían hacerse los negocios y quienes no se adaptaron al son que tocaba esta plataforma perecieron. Fue ahí donde BlockBuster comenzó a fallar, ya que no solo las franquicias del entretenimiento migraron rápidamente, sino que otros factores también comenzaron a jugarle en contra.
El Streaming mató a los videoclubs ¿Mito o Realidad?
Es innegable que el internet y las nuevas tecnologías hicieron un daño irreversible a BlockBuster. Cuando Netflix se habría paso en el mercado del entretenimiento, Reed Hastings (fundador de la incipiente compañía) solicitó ayuda económica a BlockBuster, pero sus ejecutivos consideraron que era mucho más rentable invertir en las cada vez más obsoletas tiendas físicas y no apostar por las nuevas tecnologías.
BlockBuster habría cometido un error irreversible al tomar esta decisión, pues cuando Netflix comenzó a crecer y a desplazar a los videoclubs, BlockBuster ya iba en caída libre y aunque intentó reinventarse sacrificando muchas de sus tiendas físicas para invertir en una plataforma de Streaming era demasiado tarde.
No se puede afirmar, sin embargo, que Netflix fue la culpable de la caída de Blockbuster. En un principio la compañía de Streaming no ofrecía productos de calidad que BlockBuster sí, razón por la que decidieron invertir en sus propias series, lo cual en lo sucesivo sí ayudaría a que Netflix superara BlockBuster.
Otras metodologías como el alquiler automático (llevado a cabo por Redbox en Estados Unidos) eran mucho más baratas que las tiendas tradicionales como BlockBuster y fueron haciéndole mella.
Piratería
Sí, una de las causantes de la muerte de BlockBuster fue la piratería. Aunque las tiendas físicas ofrecían todas las películas en cartelera y en alta calidad, la gente prefería verlas de manera gratuita a través de la web.
Otro de los problemas es que muchas de estas películas no tenían subtítulos o traducción, lo cual inevitablemente bajó sus ingresos en aquellos lugares donde BlockBuster tenía tiendas físicas y no se hablase la lengua inglesa.
La piratería era tal, que muchas veces algunas páginas en la red ofrecían las mejores películas, en alta calidad y en algunos casos las tenían disponibles muchísimo antes de que salieran en las carteleras de cine.
Esto, aunado a que las personas preferían la comodidad a tener que salir de sus casas a alquilar las películas en BlockBuster le jugó en contra a la empresa.
Inconstancia de sus ejecutivos
Es imposible decir que el Streaming va a sustituir por completo a los videoclubs, así como no se puede afirmar que los libros de papel perecerán ante los libros digitales. Sin embargo, no es descabellado pensar que los ejecutivos de BlockBuster no tuvieron la pericia y la constancia para mantenerse a la vanguardia al desaprovechar todas las potencialidades que aquella empresa tenía por encima de Netflix.
Por ejemplo, las películas que ofrecía BlockBuster poseían una calidad muy superior a las que Netflix poseía en su plataforma y que no podría ofrecer a sus usuarios por cuestiones de exclusividad. Esto seguramente podría haber sido una de las principales bases para ganarse un espacio en el mercado, ello sin contar su trayectoria y la ya nutrida cantidad de usuarios que poseía.
La resistencia al cambio es uno de los principales problemas de las organizaciones. Es muy probable que BlockBuster se hubiese apoderado del mercado del entretenimiento por suscripción en internet si invertía en un equipo de programadores que crease una plataforma similar a la de Netflix.
¿Cómo es posible que una empresa con un valor estimado en más de 1000 millones de dólares no pudiese financiar un proyecto como ese? Seguramente los ejecutivos no tuvieron la pericia y perspicacia que Reed Hastings tuvo a la hora de ejecutar su plan de negocios, invertir y posicionar a su marca.
Conclusiones
Ante cualquier situación de emprendimiento es importante no desistir, ya que en el mismo momento en el que esto sucede, o no encuentra la manera de reinventarse, es cuando se dirige irremisiblemente al fracaso. ¡Debemos salir siempre de nuestra zona de confort para alcanzar grandes cosas!
¡Si tienes una idea, no dudes en apostar en ella y seguir adelante a pesar de las dificultades que puedan presentarse o si alguien no apuesta por ellas! El principal inversor en un emprendimiento es su propio creador.
La constancia y la dedicación son la clave del éxito y es por eso que lo que parece una idea pequeña puede llegar a convertirse en un gran proyecto de vida solo si quien la ha ideado tiene fe en ella y no se deja amilanar por las dificultades que se le puedan presentar en el camino.